La dirigente del Consejo Taxista del Estado de Puebla (CTEP), Erika Díaz Flores, demandó a la próxima administración estatal erradique “el cáncer de la corrupción” en la Secretaría de Transporte y evite que Alberto Vivas Arroyo, Arturo Loyola González y Juan Manuel García García continúen extorsionando a los transportistas.
En rueda de prensa, dijo que por tercera ocasión atentaron contra su vida y esto fue en respuesta por su denuncia y petición al próximo gobernador de Puebla, Luis Miguel Barbosa Huerta, que realice una limpia a fondo en la dependencia encargada del transporte en el estado.
Señaló que uno de los principales promotores de corrupción es el subsecretario, Alberto Vivas Arroyo, quien, dijo, se en los dos años que lleva en el cargo generó el crecimiento desmedido de las unidades de UBER al pasar de cuatro mil a 15 mil en su periodo, además que permitió que Cabify operara sin los permisos correspondientes.
Agregó que aprovechando su cargo en la Secretaría de Infraestructura, Transporte y Movilidad reasignó por “debajo del agua” 3 mil 500 concesiones de taxis, a través de Gustavo Cabrera, y con prestanombres pasaron a formar parte de su propiedad.
Comentó que Arturo Loyola está coludido con Vivas Arroyo para operar como “intermediario” entre los transportistas y la dependencia estatal realizando cobros para que puedan transitar sus trámites incrementando los costos de 25 mil hasta los 75 mil pesos.
Díaz Flores pidió a los transportistas de Puebla presentar sus denuncias por fraude en contra de estos de Vivas Arroyo, Loyola González y “el pájaro” para que las nuevas autoridades gubernamentales tomen cartas en el asunto, hagan valer su palabra de combatir y erradicar la corrupción.