El ex candidato a la gubernatura de Puebla por el Partido Revolucionario Institucional (PRI), Alberto Jiménez Merino, evitó fijar su postura sobre el proceso de expulsión iniciado en contra del líder de la Confederación de Trabajadores de México (CTM), Leobardo Soto Martínez, y consideró que es tiempo de cerrar filas.
Señaló que el proceso electoral para elegir al gobernador constitucional de Puebla concluyó y en ese sentido se debe dar vuelta a la página para enfocarse en el trabajo de unidad para fortalecer la estructura del PRI en el estado de cara a la renovación de su Comité Ejecutivo Nacional (CEN) y posteriormente los comicios intermedios.
Cuestionado sobre la expulsión de Soto Martínez de las filas del PRI luego que la dirigencia estatal recabó las pruebas que demostraron su apoyo a otro candidato y no su proyecto, respondió que serán los órganos internos del partido quienes determinarán si se aplica esta sanción.
“El PRI está más vivo que nunca, el PRI tiene que regresar a sus orígenes sin cometer todos los errores del pasado, por ello estamos buscando a los militantes que quieran sumarse a este proyecto. El Partido se encargará de revisar estas quejas que derivan en procesos de expulsión”.
Jiménez Merino se pronunció en favor de Alejandro Moreno Cárdenas para que asuma la presidencia nacional del PRI al asegurar que es el perfil que garantiza a su partido emprender una reconstrucción de fondo que les permita regresar al lugar que les corresponden en el escenario político de México.