El activista Miguel López alcanzó la libertad después de la audiencia celebrada en Casa de Justicia de Tlaxcalancingo y exigió que el Gobierno del Estado revise la obra del colector industrial de Huejotzingo al señalar que si está generando contaminación.
Después de varias horas, López Vega apareció en las puertas de esta instalación y resaltó que continuará con su lucha por la defensa de la tierra.
Entrevistado por medios de comunicación, destacó que quienes tendrían que estar presos son los grandes dueños de las empresas, que ejecutan estas obras, “ellos son las personas que están asesinando, están matando nuestros árboles, ellos son los que tendrían que rendir cuentas, son más de cinco años que están contaminando los mantos acuíferos”
Al ser cuestionado si se consideraba un preso político, contestó que sí y aseveró que fue un momento difícil ya que en estos días vivió las condiciones de cientos de reclusos.
Bajo las consignas de el “Pueblo Unido, jamás será vencido” fue recibido con abrazos de parte de su familia y compañeros de lucha.