El nuevo titular de la Auditoría Superior del Estado (ASE), Francisco Romero Serrano, rechazó que su nombramiento haya sido un pago de facturas por su afinidad con el Movimiento de Regeneración Nacional (Morena) y aseguró que su apuesta será cambiar la imagen del órgano fiscalizador en Puebla.
En entrevista posterior a rendir protesta al cargo por los siguientes siete años, señaló que su principal apuesta será demostrar que la ASE no será más "un garrote político" en contra los presidentes municipales y los sujetos obligados de fiscalización.
Cuestionado por los señalamientos de imposición y opacidad en su proceso de selección así como sus vínculos con Morena, respondió en forma parte de la guerra sucia por cuestiones políticas y aseguró que su compromiso es ser imparcial en la revisión de cuentas públicas.
"Primero imparcialidad, técnica e imparcialidad, Espero que entremos a una nueva era y ahora en adelante la auditoría Superior haga su trabajo Como debía ser en el Plano técnico espero que entremos en una nueva era que de ahora en adelante la Auditoria Superior haga su trabajo como debe ser en el plano técnico y actuación equitativa y que se le quite esa imagen de garrote político".
Romeo Serrano destacó que a partir que inicie formalmente su trabajo en la ASE se enfocará en revertir el rezago que tiene Puebla con el Sistema Nacional Anticorrupción, en materia de rendición de cuentas, para garantizar estar al día y que los procesos de fiscalización sea más eficientes.