El ex gobernador, Mario Marín Torres, no está detrás de la designación de Alberto Jiménez Merino como candidato del Partido Revolucionario Institucional (PRI) a la gubernatura de Puebla, afirmó el presidente del Comité Directivo Estatal (CDE), Javier Casique Zárate.
En entrevista, dijo que la postulación del ex delegado federal surgió del consenso de los sectores que integran el partido y la valoración de los perfiles que buscaban ser el candidato del PRI.
Cuestionado sobre las versiones que apuntaron que con esta decisión estaría de vuelta el ex mandatario estatal y asumiría el control del partido en Puebla, desestimó esta posibilidad y sentenció que el PRI lo integran sus sectores y no los grupos.
“Esta decisión le compete y así lo hizo el Comité Ejecutivo Nacional, entonces, queremos dejar muy claro no hubo ninguna influencia externa más que los organismos y sectores con los que la presidenta, Claudia Ruiz Massieu, tuvo contacto para tomar esta decisión y no hay porque señalar factores de grupos”.
Casique Zárate confío que los liderazgos al interior del PRI se sumen al proyecto del partido para fortalecerse de cara a la jornada electoral del próximo domingo 2 de junio y puedan dar la batalla para recuperar la gubernatura de Puebla.
