Luego de que Fernando Romero Hernández fuera destituido de la Contraloría municipal de Cuautlancingo, porque en su decir presuntamente detectó irregularidades en la gestión de la presidenta, Guadalupe Daniel Hernández, informó que procederá judicialmente por la sustracción ilegal de documentación comprometedora para esa administración y contra quien resulte responsable en el caso de que le llegará a suceder algo, pues aseguró que ha recibido en tres ocasiones amenazas de muerte, esto vía telefónica.

“Me faltan dos carpetas, en las cuales estaba llevando a cabo la investigación de la revisión del estado financiero. Me faltan dos escrituras de mis terrenos que estoy en un proceso legal de ellos, que ya no los tengo; y, sobre todo, tenía una memoria USB en donde contenía mi información de lo que era mi área, que fue sustraída”.

Contó que sin su presencia y sin ser notificado, el secretario General, contralor y director de Recursos Humanos, “por órdenes de la presidenta”, ingresaron a la oficina que le habían asignado y se llevaron los citados documentos, para posteriormente colocar sellos de resguardo.

De acuerdo con su decir, fue su destitución porque encontró diversas irregularidades en la administración de la alcaldesa morenista, “que son muy pocos claros”.

Además de que aseguró que violando las normas, la edil tiene en la nómina del Ayuntamiento a familiares y aviadores.

Otro de sus señalamientos, es que en la junta auxiliar de San Pedro Almecatla, “el presidente está trabajando de manera coordinada con la presidenta para estarlo hostigando tanto físicamente como en los medios, por lo que siento una situación muy preocupante en contra de mí y mi familia”.

Finalmente, negó que su separación haya sido por la exhibición de un recibo que le dieron al presidente Guillermo Mendoza de San Lorenzo en donde le notifican de la participación de 100 mil pesos, cuando el mismo personaje notificó que no recibió tal cantidad en febrero.