Una de las tradiciones prehispánicas que se mantiene con vida hasta nuestros días se desarrolló en el municipio de San Pedro Cholula, donde más de dos centenares de personas fueron participes de la “embriaguez espiritual” al ser parte de la Tlahuanca, manifestación religiosa que conjuga parte de ritos prehispánicos.
Como es una tradición, el cuarto lunes de cuaresma los mayordomos de los barrios de San Pedro Cholula realizaron una procesión y arribaron a la Capilla Real de Naturales para escenificar esta milenaria ceremonia donde todo el misticismo de la época prehispánica se unió con la fe católica, al realizarse una misa en honor a San Pedro de Ánimas.
Tras la liturgia, comenzó la fiesta de la pureza del alma donde más de mil litros de pulque fueron repartidos entre los asistentes. Y es que la considerada “bebida de los dioses”, en la antigüedad sólo era saboreada por los sacerdotes al tener uno de los rangos más altos y les permitía tener un diálogo cercano con Dios.
Hoy los asistentes pidieron a Dios por mejores cosechas y posteriormente pudieron purificarse al saborear esta bebida donde propios y extraños se sumaron a esta festividad en la que además compartieron el pan y la sal para mantener un año más esta festividad viva.