Los cánones en materia de seguridad indican que cualquier funcionario encargado de la protección de la sociedad en una entidad o municipio es traído de otros estados o servió a dependencias en otros estados, la delincuencia vendrá de esos lugares.
El ejemplo más claro en Puebla, fue reciente.
La administración del extinto gobernador, Luis Miguel Barbosa Huerta, trajo y confió la seguridad de los poblanos en los chiapanecos.
Acto seguido, los asaltos, robos, extorsiones, fueron cometidos en su mayoría por delincuencia chiapaneca.
incluso el mal manejo dentro del penal de San Miguel, fueron los propios chiapanecos que sembraron todo tipo de irregularidades en el centro penitenciario.
Hace no mucho, apareció un carro incendiado en las inmediaciones del Parque ecológico, la manta, presuntamente fue depositada por la organización criminal La Familia Michoacana.
Cuidado. Quién nos cuida a los poblanos.
*Fin de semana sangriento.
Tanto el gobierno del Estado como los municipios tendrán que ajustar o modificar su estrategia de seguridad.
No hay más.
Entre el viernes y el domingo en Puebla se registró el encuentro de ocho cuerpos desmembrados, emplayados o simplemente con huellas de tortura.
Puebla se tiñó de sangre.
Cinco cuerpos en la zona de Los Fueftes, justo atrás del área donde será la próxima feria de Puebla.
Algún mensaje?…para quién?
Un cuerpo más fue encontrado emplayado en el municipio de Cuautlancingo, justo en el mismo lugar donde se encontraron una semana atrás dos cuerpos más con las mismas características.
La cifra roja del fin de semana cierra con dos cuerpos decapitados en el municipio de Acajete.
Todos estos ocho cuerpos tienen la misma marca, signos de violencia y clara demostración de que fueron ejecutadas por el crinen organizado.
Y contando.