La reforma electoral de la presidenta, Claudia Sheinbaum Pardo, es viable y se deben analizar con objetividad sus alcances y beneficios para la democracia del país.
La diputada federal por el Partido del Trabajo (PT), Nora Merino Escamilla, señaló que es positiva la posibilidad de recortar el presupuesto a los partidos políticos.
Expresó que los ciudadanos demandan la reorientación de estos recursos para atender necesidades prioritarias como la seguridad y la obra con sentido social.
Enfatizó que otro planteamiento es la modificación del proceso de asignación de diputaciones, plurinominales para crear la figura del “gran perdedor”.
“Solamente hemos tenido un pequeño bosquejo de lo que va a hacer, y además la presidenta lo ha dado a conocer de manera muy puntual, primero habrá mesas de debate y mesas de trabajo (…) Es la primera idea del bosquejo, pero no se tiene todavía ya de manera particular, creo que es urgente una reforma político electoral, sin embargo, es necesario que se debata, que se analice y que se escuchen a todas las voces”.
Merino Escamilla rechazó categóricamente que la propuesta presidencial sea un atentado en contra de la democracia y una intención para minimizar a la oposición.
Demandó revisar a profundidad el planteamiento presidencial, antes de señalar una intención para obtener el control total del país.