Audi México anunció la suspensión temporal de actividades en su planta de San José Chiapa debido a los bloqueos carreteros registrados en los últimos días.
Estás expresiones golpean duro al sector industrial del país al grado que la Cámara Nacional de la Industria de la Transformación (Canacintra) estima pedidas superiores a los 2 mil 300 millones de pesos.
Las manifestaciones han impedido el paso de transportes con autopartes y materiales, afectando directamente la producción en una de las armadoras más importantes del territorio nacional.
Miles de trabajadores se ven hoy en pausa forzada, sin poder ingresar a sus labores. Y no solo ellos: también las empresas proveedoras y comercios locales comienzan a resentir el impacto económico.
Hay que considerar que en el país el derecho a la libre manifestación está garantizado y es fundamental para expresar inconformidades. Pero también es importante recordar que el límite de un derecho está en el daño que puede causar a otros.
Este paro industrial nos deja una lección: la protesta es legítima, pero la responsabilidad social también lo es. Encontrar equilibrio es clave para no afectar a quienes no son parte del conflicto.







