La Secretaría de Educación Pública del Estado de Puebla informa que, a la fecha, un total de 419 estudiantes pertenecientes a 77 escuelas (73 públicas y 4 privadas), de educación obligatoria (Preescolar, Primaria, Secundaria, Telesecundaria y Bachillerato), presentan síntomas del virus Coxsackie. Las y los estudiantes permanecen en sus hogares con actividades académicas para dar continuidad al avance programado.
Las y los directores de los planteles han aplicado el protocolo correspondiente: informan de manera inmediata a la madre, padre o tutor de los síntomas de la o el alumno, solicitan que acudan al centro de salud más cercano, y que sigan las recomendaciones que determine el sector salud para evitar contagios.
Es importante destacar que, la suspensión de actividades es determinada por los directivos de cada plantel únicamente en los salones en donde existen casos confirmados por las autoridades sanitarias, para evitar el contagio; posteriormente, con apoyo de las madres y padres de familia realizan jornadas de limpieza en las aulas antes del retorno de los estudiantes a la escuela.
Son 20 los municipios en los que se han detectado síntomas en los alumnos: Puebla, Izúcar de Matamoros, Tehuitzingo, Tlachichuca, Chalchicomula de Sesma, San Andrés Cholula, Santa Catarina Tlaltempan, Esperanza, Palmar de Bravo, Coronango, San Nicolás Buenos Aires, Teziutlán, Chietla, Tilapa, Tlapanalá, Atzitzihuacán, Acajete, Acatlán de Osorio, Aljocuca y Hueytamalco.
La SEP estatal trabaja de manera coordinada con la Secretaría de Salud, a través de jornadas de limpieza, desinfección en las aulas y zonas de uso común. Las recomendaciones para prevenir la propagación del virus son: lavarse las manos con agua y jabón regularmente, evitar compartir utensilios, vasos u otros objetos personales, evitar contacto con personas infectadas, mantener limpias las superficies y objetos de uso común y usar cubrebocas.
Con estas acciones la dependencia mantiene el compromiso de cuidar y atender las necesidades de la comunidad escolar, así como, propiciar ambientes seguros que garanticen la impartición del servicio educativo adecuadamente.