Por: María Tenahua
Este martes en el Paseo Bravo, la gente hizo una enorme fila para ser atendida por Mircea Gabriel, quien es originario de Rumania, quien se dice sanador de dolores.
Desde temprana hora las personas llegaron a la zona, en donde se ubica en una banca, pasando el monumento al general Nicolás Bravo.
Los creyentes a este extranjero, se organizan y le hacen vaya para que pueda hacer sus “milagros”.
El europeo inició en el Carolino y está semana se trasladó al Paseo Bravo.