En línea con el incremento que han registrado los fraudes cibernéticos en los últimos dos años -a raíz de la pandemia de covid-19, donde aumentaron las interacciones digitales-, se prevé que el ilícito tendrá un repunte en estas fechas decembrinas, debido a que los delincuentes aprovecharán que muchas personas reciben su aguinaldo y están distraídas con la compra de regalos y en la planeación para las cenas de Navidad y Año Nuevo.

Ante ello, autoridades y expertos en ciberseguridad invitan a la ciudadanía a ser precavidos y tomar acciones para evitar ser víctimas de los hackers, debido a que aún no existen en el país medidas de seguridad como la doble autenticación con biométricos, que busca prevenir estos robos.

Y es que, de acuerdo con cifras de la Comisión Nacional para la Protección y Defensa de los Usuarios de Servicios Financieros (Condusef), las quejas por fraudes cibernéticos han tenido un repunte de más del 100% de 2019 a la fecha. En el periodo previo a la pandemia se registraban un promedio mensual de 1,000 quejas relacionadas con este problema, con un total de 12,721 durante 2019, y subió ligeramente en 2020, al presentarse 15,956 denuncias, pero alcanzó su máximo actual de 2,100 quejas promedio al mes en este 2021, con un total de 20,928 a octubre.

Además, ha aumentado el porcentaje de fraudes cibernéticos respecto al total de quejas, ya que mientras en años pasados representaba el 12.9%, actualmente es el 33%. Según Jesús Chávez, director de Análisis y Estadísticas de Servicios y Productos Financieros de la Condusef, este incremento está relacionado con la pandemia, periodo en el que se ha dado un aumento importante en las compras vía internet y las transferencias digitales.

Agregó que, tradicionalmente, en diciembre de cada año viene una caída en las reclamaciones, pero sólo es porque en ese mes se están gestando los fraudes que serán descubiertos y denunciados durante el primer trimestre del año siguiente, por lo que prevé que a inicio de 2022 se mantendrá esta tendencia. “Las personas hacen las compras, se les generan cargos no reconocido o fraudes, pero se dan cuenta tiempo después, porque están distraídos por la temporada o prefiere esperarse a que pasen las fiestas para hacer la reclamación”, indicó.

Cuidado con la ingeniería social

Durante 2020 y 2021, una de las estrategias que más les ha redituado a los cibercriminales es la denominada ingeniería social, que consiste en establecer contacto con la víctima, ya sea vía telefónica o a través de un correo electrónico, y alertarla sobre supuestos movimientos inusuales en sus cuentas o enganchándola con créditos fáciles o promociones atractivas. Así, el delincuente logra extraer datos personales sensibles, como números y códigos de seguridad de cuentas y tarjetas bancarias, con los que pueden realizar transferencias o compras vía internet.

Actualmente, las transferencias representan la mayoría de las reclamaciones por fraude cibernético, ya que, de las 20,928 quejas presentadas en lo que va del año, 15,404 fueron por este motivo; mientras que por consumos vía internet no reconocidos se presentaron 4,445 quejas.

“Los criminales pueden llegar a ser muy convincentes y proporcionan información que hace que las personas confíen en ellos, además de que buscarán atacarnos cuando estemos más vulnerables: mientras vamos manejando, cuando estamos corriendo porque vamos tarde al trabajo o cuando estamos esperando la oferta de nuestros sueños. Por eso debemos ser muy cautos al momento de reaccionar tanto al miedo como a la euforia para evitar caer en estas trampas”, advierte Adolfo Loera, presidente del Consejo de Administración de Biometría Aplicada.

El experto en identidades digitales señaló que aunque este tipo de ilícitos podrían ser frenados por la doble autenticación con biométricos, es decir, que para que se autorice una operación sea necesario que el usuario proporcione un NIP dinámico y valide su identidad a través de un reconocimiento biométrico, todavía pasará algo de tiempo para que pueda implementarse en México. En 2019, los bancos iniciaron con el proceso de recabar las biometrías de los usuarios, pero éste ha avanzado de forma lenta debido a la pandemia.

Mientras no tengamos alternativas como la doble autenticación con biométricos, continuó Loera, es necesario que la población tome medidas para protegerse, y entre las recomendaciones están:

En cualquier época del año, evitemos dar información personal a cualquiera o limitemos el tipo de datos que proporcionemos. Ningún ejecutivo de cuenta de un banco te solicitará el NIP o el código de seguridad de tus tarjetas para algún trámite o reporte.

Si crees haber proporcionado información sensible a un extraño, llama a la línea oficial de tu banco (que se encuentra impresa en tu tarjeta) e infórmalo.

Si te llaman para advertirte sobre movimientos inusuales en tus cuentas, cuelga y llama directamente a tu banco para validarlo.

Ten activas las alertas vía SMS o de tu app bancaria, y en caso de recibir una notificación sobre un cargo que no has hecho, llama de inmediato a tu banco para que bloqueen las operaciones.

Si vas de compras, nunca pierdas de vista tu tarjeta y si te es posible, de inmediato valida en tu app bancaria que sólo se haya hecho el cargo respectivo.

Siempre bloquea tu celular y activa todos los candados de seguridad que el dispositivo te proporcione. Recuerda que muchas apps bancarias responden a los datos biométricos guardados en el teléfono, por lo que si éste se encuentra desbloqueado, es factible que hagan operaciones en tu nombre.

Si realizas compras vía internet, valida que sea una tienda en línea confiable.

Evita dejar sesiones abiertas en tiendas online y no dejes guardados tus datos bancarios, aunque te resulte impráctico tener que ingresarlos cada que realizas una compra.

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“No debemos olvidar que en los cajeros automáticos también me pueden hacer un fraude. Alguien se me acerca, me embauca de alguna manera e intercambia mi tarjeta con otra del mismo banco, y después la utiliza para hacer compras en línea. Aunque los delincuentes siempre buscarán el menor riesgo y este modus operandi es más peligroso para ellos, debemos estar alertas porque sí se dan casos. La recomendación siempre será no acudir a los cajeros ubicado en zonas solitarias, ir acompañado y no aceptar ayuda de extraños”, concluyó Loera.