César López
La Cámara Nacional de la Industria Restaurantera y de Alimentos Condimentados (Canirac) prevé caída de cinco por ciento en sus ventas con la restricción para vender bebidas alcohólicas durante contingencia sanitaria por COVID-19 en Puebla y pidió acelerar el Plan de Reactivación Económica así como apoyar a los trabajadores del sector.
La presidenta de la agrupación, Olga Méndez Juárez, señaló que desde el inicio de la emergencia sanitaria las ventas en el sector se desplomaron en 90 por ciento respecto a la misma temporada de años anteriores poniendo en riesgo los miles de empleos que genera.
Expresó que el decreto carece de elementos que justifiquen sanciones para quienes comercialicen bebidas alcohólicas abiertas, que van de 15 días a un año de prisión, o multas de uno a 10 días de salario que equivalen entre 123.22 pesos hasta mil 232.2 pesos, por lo que pidió reconsiderar la decisión.
Subrayó que la prohibición de vender bebidas alcohólicas abiertas derivará en una nueva caída en las ventas estimada entre tres y cinco por ciento por lo que aquellos restaurantes que mantenían abiertas se verán en la necesidad de bajar sus cortinas por la imposibilidad de mantener los gastos de operación.
Méndez Juárez expresó que los empresarios del sector están pidiendo al gobernador, Luis Miguel Barbosa Huerta, agilizar la entrega de créditos a la iniciativa privada y unirse, de manera personal, a la campaña “Esta vez, yo invito”, con la que se pretende cubrir las necesidades alimentarias de 14 mil trabajadores del gremio, que se han quedado sin sustento.