Al término del este 2017 la Delegación en Puebla del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) habrá realizado 44 mil estudios de mastografía a mujeres de entre 40 a 69 años de edad, lo que implica una meta del 25 por ciento de la población derechohabiente y con lo que se contribuye a detectar y prevenir el cáncer de mama.

La Coordinadora Delegacional de Salud Pública del IMSS Sofía Reyes Niño, puntualizó que debido a que esta es la primera causa de muerte en mujeres en México el Instituto le ha apostado por realizar este tipo de estudios a todas las mujeres por lo menos una vez cada dos años, que estén en el rango de edad.

Detalló que durante el mes de noviembre la campaña se intensifica para llegar a la población meta; “las mujeres deben acudir a su clínica al módulo de PrevenIMSS y ahí la enfermera le hará su solicitud de estudio para que se realice en nuestros mastógrafos o a través de las 6 Unidades Móviles”.

Expuso que entre el 1 y el 3 por ciento de los estudios arroja una sospecha de cáncer; ante este panorama a la paciente se le envía con el oncólogo, para realizar más estudios que determinen una patología maligna  y se le de tratamiento clínico o quirúrgico.   

La Doctora Sofía Reyes Niño, reveló que también se dan casos de cáncer de mama en masculinos, pero es poco común, “se podría presentar un caso al año, pero cuando se tiene en el Instituto le damos la misma atención y tratamiento, si se detecta una bolita, secreción le hacemos la mastografía y ultrasonido o biopsia”.

El médico radiólogo del IMSS Víctor Manuel Palacios Hidalgo, refirió que la mastografía es un estudio prioritario y que ha demostrado su efectividad para la detección del cáncer en estadios tempranos, por ello, se debe realizar en el rango de los 40 a 69 años o antes si existen antecedentes familiares o se presenta algo anormal en el pecho o la zona de la axila.

Recalcó que este mal es asintomático y cuando se presenta en una etapa in situ, tiene una probabilidad de curación del 100 por ciento, por eso dijo que las mujeres deben cuidar su alimentación, el sobrepeso y el número de hijos que tienen, ya que esos son factores de riesgo para un cáncer de mama.