Falta un mes para las elecciones del primero de julio y todo indica que este arroz se coció en favor del candidato de la coalición Juntos Haremos Historia a la presidencia de México, Andrés Manuel López Obrador.

En qué me baso para señalar lo anterior.

La reciente encuesta del Periódico Reforma es abrumadora y aplastante.

Previo al segundo debate presidencial, Andrés Manuel López Obrador tenía el 48 por ciento de preferencias electorales.

Hoy, esas preferencias con base en la encuesta del periódico nacional, suben hasta el 52 por ciento.

Otro ejemplo de que este arroz ya se coció para el tema de la presidencia de México a favor de “ya sabe quién”, es el reciente simulacro electoral realizado por la Benemérita Universidad Autónoma de Puebla.

Esas preferencias electorales, sin duda, son gracias a los últimos 18 años de campaña que realizó por México, a fin de convertirse en presidente del país.

Andrés Manuel López Obrador creó su partido que es Morena y a través de este, capitalizó la ira y enojo en contra de los institutos políticos que están en el poder en los últimos años.

Sin embargo y como dirían los políticos, los votos y no las encuestas son la garantía de triunfo.

Efectivamente, las encuestas no son garantía de triunfo, toda vez que el puntero en las preferencias electorales tiene un reto que superar.

A qué me refiero.

López Obrador tiene que enfrentarse al poder y evitar que en julio, sea derrotado por el sistema a través de grandes cantidades de dinero que servirán para comprar votos.

El escenario nacional, se estaría aterrizando para el caso de la renovación del gobierno de Puebla.

Si bien, el candidato de la coalición Juntos Haremos Historia, Miguel Barbosa Huerta, es arrastrado por la ola del peje para tratar de ganar el 1 de julio, no significa que sea el nuevo gobernador del estado.

En pocas palabras, Barbosa Huerta y el resto de candidatos a un cargo público que son de Morena, tiene que reforzar, pulir y amarrar una verdadera estructura política para triunfar en las votaciones.

Si no logran lo anterior, por mucho que Morena tenga una buena preferencia electoral gracias a López Obrador, el sistema en Puebla y me refiero al morenovallismo, estarían derrotándolos.

Hasta aquí mi reporte.

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LA FRASE

“El combatiente inteligente impone su voluntad en su enemigo, pero no permite que la voluntad de su enemigo le sea impuesta”.

Sun Tzu